Durante las vacaciones de primavera, fuimos a esquiar en Limone. Es una zona de esquí hermosa que aún no está invadida por el turismo masivo, ni siquiera en esa semana. Muy seguro en cuanto a la nieve, tuvimos todos los días sol. ¡No hemos visto a holandeses y no hay apres-ski! El hotel en sí era bueno y está provisto de muchos extras, solamente es que....., el bar con el personal incluido no sirve. No podían servir cerveza del barril y todo se hacía súper lento, al final de la semana, todas las bebidas fuertes se habían agotado e incluso la coca-cola estaba agotado. Pareciera que no le importara al personal, ¡son unos....! No nos van a ver más a nosotros en este hotel, vamos a volver a la zona ya es hermoso para esquiar.