lo positivo: personal amigable, cerca del metro, bastante bien renovado (luego de la renovación en 2006), funcional (cama, ducha, comida, todo lo que se necesite, pero en principio básico). Todos los días toallas limpias, el baño y la ducha bastante limpios. Lo negativo: a veces estaba un poco sucio (por ejemplo, manchas sucias en la manta y con agujero), espacios pequeños (¡¡la habitación medía 3x3, la ducha .50x.50!!), el desayuno era limitado (no había fruta, leche ni huevos). Luego de 3 días se vuelve monótono. En conclusión: ¡cumple como lugar para pernoctar, pero no esperes un lujo excesivo!